domingo, 1 de abril de 2012

Smile! Eh tú, ¿lo oyes? Pues eso.

''Te odioh, no me havles jamas'' hace dos días

''Te kIeRoh muxo mi gordi, EresH lo mejor K mE hA pAzado en Mi bidaa'' hace diez segundos


Llamadme incomprensible, poco empática, antirromántica.... Lo que queráis, pero en serio... El mundo se ha vuelto rematadamente loco. Perdonadme por los inicios de la entrada, no me he vuelto choni ni similares, simplemente que cada vez me da más asco está sociedad. En serio, ¿cómo puede haber tanta bipolaridad? Qué baratos se venden últimamente los te quieros, y qué fácil se regalan las mentiras.

Sinceramente (sí es que eso aún existe) ¿qué clase de venda os tapa los ojos, los oídos y, en general, os asfixia las neuronas (si tenéis)? Dar un paseo por las redes sociales, indulto el 90% de twitter, en realidad el motivo de mi enervación se encuentra en tuenti. Las frases iniciales se pueden leer en cualquier perfil de gran parte de la fauna autóctona del lugar. Y en serio, no es por criticar ni mucho menos. Pero...

Suena taaaan ridículo. Desprendéis bipolaridad, estáis cargadit@s. En serio, es totalmente imposible pasar de querer a odiar a alguien cinco veces en la misma semana... o será que soy cortita y no comprendo el mundo en que vivimos.

Y me podréis decir que al que no le guste que no mire, y tenéis razón, cada vez que detecto síntomas de imbecilidad de alguno de mis contactos opto por cortar por lo sano, en la mayoría de los casos.

Y hoy me siento criticona, así que no me voy a quedar ahí.

Me apetece despotricar contra esa gente que no vale ni para amaestrar piedras. Esa gente fría, cruel, interesada, calculadora, falsa, hipócrita, detestable, odiosa, tocapelotas.... puuuf vamos a relajarnos, que me conozco.

Ya sé que esta entrada no vale para nada, que es una auténtica birria, pero ya sabéis lo que dicen, que el perro se parece al amo, y la dueña aquí es una servidora con muchos complejos.

Y quiero pedir perdón a toda la gente que me soporta, que está ahí, día tras día, aguantando la tormenta y todos las borderías que suelto. Y no sé qué me pasa... llevo un par de semanas con ganas de asesinar a todo el mundo, no entiendo porqué la susceptibilidad ha llamado a mi puerta y no se quiere ir. Y mira que yo no la quise abrir y la muy zorrita se coló por mi balcón antes de que me diera tiempo a abrirla.

Y no sé que será... si el estrés que me hace tener ya hasta pesadillas con la maldita selectividad y los temas cuatro de literatura con su posterior examen de historia, o será el saber que por muchos amigos que tenga siempre habrá alguien dispuesto a clavarme un cuchillo bien fuerte por la espalda para acordarse de dónde lo guarda, el saber que pierdo gente necesaria e imprescindible poco a poco, se van alejando y me van dejando sola y sin saber qué hacer ni cómo orientarme, será el saber que no hay nadie aquí para darme un abrazo cuando me dan ganas de mandar todo a la mierda y que a las pocas personas que sí lo harían las estoy fallando sin darme cuenta, será el saber que echo de menos una sonrisa en la que refugiarme y una voz que me susurre ''tranquila, todo irá bien''. Será la música que he elegido hoy, o los lacasitos que me han sentado mal. O será el miedo a fracasar y a no seguir adelante. Será el miedo a crecer y a estar sola... sola... sola.

Hoy estaba viendo un capítulo atrasado de los protegidos por pasar el rato, iba de carlitos y su miedo a tener novia, y su padre le decía: ''cierra los ojos y recuerda el día que la viste por primera vez, el día que hablaste con ella, el primer día que la hiciste sonreír, todos los momentos que habéis pasado juntos. Ahora imagina que eso no ha pasado nunca, que nunca la has conocido, que jamás has visto su risa, y nunca has hablado con alguien como ella... te pone muy triste ¿verdad?'' (o algo así, no vamos a ser tiquismiquis) y la verdad, es que será eso lo que echo de menos, el tener a alguien cuyo recuerdo me empuje a seguir adelante, porque no tengo a nadie que me haga sentir eso, hace mucho muchísimo tiempo que no sé lo que es eso, y lo gracioso es que sé lo que pasa después, y tengo miedo, como carlitos. Pero en ninguno de los casos quiero convertirme en una veleta sobre las que tanto despotricaba al iniciar esta entrada. Tan solo quiero lo que el resto de adolescentes y que el resto del mundo. Ser feliz y poder gritar al mundo mi palabra preferida, por muy graciosa que les resulte o mucha gracia que les haga. smiLe :) porque lo importante será seguir adelante y ya vendrán tiempos mejores.
 


Ya llevo un año sin engancharme a nadie, sin hacer daño ni sentir nada especial más allá de una noche de calor.








Es evidente, NO QUIERO NI VERTE.

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